4.3.4 En Cláusulas Adverbiales

 

En las secciones anteriores repasamos los contextos en que el subjuntivo aparece en las cláusulas nominales y en las adjetivas. Recordarás también que mencionamos un tercer tipo de cláusulas en las que aparece el subjuntivo. Tenemos también cláusulas adverbiales. 

En esta sección examinaremos con cuidado este tipo de cláusulas. Repasaremos qué es una cláusula adverbial, en qué contextos estas cláusulas toman el subjuntivo y cómo esos contextos reflejan la imposibilidad de afirmar la información en la cláusula.

Ya mencionamos que las cláusulas forman parte de una oración y cumplen una función dentro de esa oración. Las cláusulas adverbiales cumplen la misma función que cumpliría un adverbio en una oración simple. Estas cláusulas nos dan información, por ejemplo, sobre el tiempo, el propósito o la condición de la realización de la acción comunicada por el verbo en la oración principal.

Mira la siguiene oración:

Juan comprará su billete de avión mañana.

 

¿Dónde está el adverbio? ¿A qué verbo modifica?

 

Juan comprará su billete de avión mañana.

        verbo                                adverbio

 

En la oración anterior "mañana" nos da el tiempo de la acción del verbo. Nos dice cuándo comprará Juan su billete de avión. Ya que nos da información sobre la acción del verbo, denominamos este tipo de palabra "adverbio". En ocasiones, el tiempo ( o el propósito, la condición, etc.) de la acción del verbo de la cláusula principal se nos da en base a otra acción. Es decir, una acción tiene lugar antes, después o al mismo tiempo que otra acción. En este caso, la información se comunicaría en una cláusula adverbial (de tiempo) en lugar de en una sola palabra.

Juan comprará su billete de avión cuando tenga dinero.

En este caso, ¿qué parte de la oración nos da el tiempo de la acción de comprar?

 

Juan comprará su billete de avión cuando tenga dinero.

       verbo                                        cláusula adverbial

En el ejemplo anterior, el tiempo de la acción de comprar se nos da tomando como referencia temporal otra acción. En lugar de un adverbio tenemos una cláusula que cumple la misma función que un adverbio. Es una cláusula adverbial. La cláusula adverbial va unida a la principal a través de una conjunción o nexo adverbial. Nexos comunes son: cuando, mientras que, antes de que, hasta que, en cuanto, a pesar de que, a menos que, a no ser que, en caso de que, con tal de que, a condición de que, porque, como, ya que, etc.

De igual manera que con las cláusulas nominales y adjetivas, no siempre que tenemos una cláusula adverbial usamos el subjuntivo. Usaremos el subjuntivo en cláusulas adverbiales sólo cuando la información contenida en la cláusula no se puede afirmar como real. Si la acción de la cláusula subordinada no ha ocurrido teniendo en cuenta el contexto temporal establecido en la cláusula principal, el verbo de la subordinada irá en el subjuntivo. Si sí ha ocurrido y el hablante puede afirmar la realidad de esa acción, el verbo irá en el indicativo.

En este sentido, resulta útil recordar que hay ciertas conjunciones cuyo significado implica la no realización de la acción de la cláusula subordinada. En estos casos, siempre usaremos el subjuntivo. Hay otras conjunciones cuyo significado implica la realización de la acción en la cláusula subordinada. En estos casos, siempre usaremos el indicativo. Finalmente, hay conjunciones que tomarán el indicativo o el subjuntivo dependiendo de la intención comunicativa del hablante. Si percibe la acción de la cláusula subordinada como realizada usará el indicativo y si no el subjuntivo. En este último caso, el significado de la conjunción es determinado por el uso del indicativo o el subjuntivo en la cláusula que sigue.

Siempre indicativo Siempre subjuntivo Indicativo/Subjuntivo

porque

ya que

puesto que

por lo tanto

para que

a fin de que

sin que

con tal de que

a condición de que

siempre que

a no ser que

a menos que

en caso de que

suponiendo que 

antes de que

de modo que

de manera que

como

aunque

cuando

hasta que

mientras

tan pronto como

en cuanto

después de que

 

 

Examinando las diferentes categorías, veremos que en el caso de las conjunciones que siempre van seguidas del indicativo, el uso de éste se explica porque siempre introducen información que el hablante puede afirmar como real. 

Necesito comprar un diccionario de español porque mi profesora de español lo requiere para la clase.

La cláusula adverbial--"porque mi profesora de español lo requiere para la clase"--nos da la causa por la cual el hablante necesita comprar el diccionario. El hablante puede afirmar esa causa como real y por ello usa el indicativo. Este es el caso con todas las conjunciones incluidas en la primera columna del cuadro de arriba. Siempre introducen información que el hablante puede afirmar como real.

En cuanto a las conjunciones de la segunda columna, éstas siempre introducen información que el hablante no puede afirmar como real. 

Le compré un diccionario a mi hermana para que pudiera usarlo en su clase de español.

La conjunción "para que" siempre introduce información futura con respecto a la cláusula principal. En este caso "para que pudiera usarlo..." indica el propósito de la acción de "comprar", un propósito que está en el futuro con respecto a esta primera acción y que por lo tanto no se puede afirmar como real. Este es siempre el caso con "para que" y también con "a fin de que".

Algo similar ocurre con las conjunciones que comunican una condición bajo la cual debe producirse la acción de la cláusula principal. 

Ana, puedes ir a la fiesta con tal de que hayas terminado toda tu tarea.

Conjunciones como "con tal de que", "a condición de que" y "siempre que" ("siempre que" en su sentido condicional, y no en su sentido temporal) comunican una condición para la realización de la acción en la cláusula subordinada. Esta condición no se puede afirmar como real puesto que no se sabe si se va a realizar o no. Por lo tanto, siempre introducen cláusulas en las que se usa el subjuntivo.

Conjunciones como "a no ser que" o "a menos que" introducen excepciones al cumplimiento de la acción en la cláusula principal. Las excepciones introducidas por estas conjunciones no se pueden afirmar como reales y por lo tanto siempre van seguidas del subjuntivo.

Ana no podía ir a la fiesta a menos que terminara su tarea.

En este caso "terminar la tarea" es la excepción a "no ir a la fiesta", pero no podemos afirmar la realización de "terminar la tarea" y por eso usamos el subjuntivo. Este mismo tipo de lógica explica que el resto de las conjunciones en este grupo vayan siempre seguidas del subjuntivo.

El grupo sin duda más interesante es el de la tercera columna, ya que es es este grupo en el que más claramente vemos el contraste modal entre indicativo y subjuntivo. Empecemos con las conjunciones de tiempo: cuando, hasta que, mientras, tan pronto como, en cuanto, después de que. 

Compara las siguientes oraciones.

"Compré las entradas para el concierto cuando salieron a la venta."

vs.

"Compraré las entradas para el concierto cuando salgan a la venta."

En el primer caso "cuando salieron a la venta" nos indica el tiempo de la acción de "comprar". Ya que tanto la acción de "comprar" como la de "salir a la venta" ya tuvieron lugar, se puede afirmar como real la información de la cláusula subordinada, y de ahí que se use en ella el indicativo. En el segundo caso, sin embargo, la acción de comprar no ha tenido lugar todavía, lo cual implica que la de salir a la venta tampoco ha ocurrido y, por lo tanto, no se puede afirmar como real, de ahí el uso del subjuntivo. Vemos aquí claramente cómo el poder afirmar la información de la cláusula subordinada--ha ocurrido---implica el uso del indicativo mientras el no poder afirmar esa información--no ha ocurrido--implica el uso del subjuntivo.

Atención a las cláusulas de tiempo en un contexto pasado. Es posible hablar de una acción pasada que no ha ocurrido, y en este caso, a pesar de estar en el pasado, todavía usaríamos el subjuntivo en la cláusula subordinada. 

Iba a salir de vacaciones cuando tuviera dinero.

En este caso, la acción de salir de vacaciones es pasada, pero no sabemos si fue realizada o no--el hablante dice que "iba a slair" y no "salí"--, lo cual implica que tampoco podemos afirmar la realidad de la información de la cláusula, porque no sabemos si llegó a tener dinero o no, de ahí el uso del subjuntivo.

Veamos ahora la conjunción "aunque". Compara:

"Aunque quiero, no puedo ir a la fiesta."

vs. 

"Aunque quiera, no puedo ir a la fiesta."

En el primer caso, el hablante afirma la información. Quiere ir a la fiesta, pero no puede. En inglés, se comunicaría esta idea con "Although I want to go...". En el segundo caso, el hablante no afirma la información. No sabemos si quiere ir o no. En inglés, se comunicaría esta información con "Even if I want to go...".

También la conjunción "como" puede introducir tanto el indicativo como el subjuntivo. Compara:

"Haz el pastel como tú quieres."

vs. 

"Haz el pastel como tú quieras."

En el primer caso, el hablante sabe cómo la persona con la que está hablando quiere hacer el pastel y, por tanto, puede afirmar esa información, usando para ello el indicativo. En el segundo caso, el hablante no sabe cómo lo quiere hacer, así que no puede afirmar la información, usando por ello el subjuntivo. El contraste entre indicativo y subjuntivo permite, en este caso, comunicar de forma muy concisa una diferencia de significado que en inglés tendría que aclararse a través del léxico: "Make the cake in the way you want to make it (and I know how that way is)." vs. "Make the cake in whichever way you want."

Finalmente, vemos algo similar con "de modo que" y "de manera que". Irán seguidos también de indicativo o subjuntivo según el hablante pueda o no afirmar la información en la cláusula subordinada. Compara:

"La profesora siempre les da tarea extra a sus estudiantes de modo que ellos entienden bien las cosas."

vs.

"La profesora siempre les da tarea extra a sus estudiantes de modo que ellos entiendan bien las cosas."

En el primer caso, debemos interpretar la cláusula subordinada como causativa. Es decir, la causa por la que los estudiantes entienden es porque la profesora les da tarea extra. El hablante puede afirmar la realidad de que los estudiantes entienden y por eso se usa el indicativo. En el segundo caso, la cláusula subordinada comunica propósito. La profesora les da tarea para que los estudiantes entiendan, pero el hablante no puede afirmar que realmente los estudiantes aprendan o no. En inglés, la diferencia se comunicaría otra vez al nivel léxico: "The teacher always gives extra homework and because of that her students understand things well." vs. "The teacher always gives extra homework so that her students understand things well."

En definitiva, recuerda: usarás el indicativo en cláusulas subordinadas cuando la información en la cláusula se puede afirmar como real. Esto puede ser porque es la causa conocida de otra acción o es una acción que ya ha ocurrido. Se usará el subjuntivo cuando la acción en la cláusula no se puede afirmar como real. Esto puede ser porque es una excepción o una condición que no se sabe si va a ocurrir o no, es el propósito futuro de una acción anterior, o es una acción futura.


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